La presente nota plantea una mirada que contextualice una acción de tutela, desarrollada en el marco el convenio Cites[1] suscrito el año 1975 en Santiago de Chile, planteado la pregunta ¿qué podemos salvar? como un llamado a repensar lo que protegemos. Acción necesaria en el desarrollo de un proceso, que asimila una categoría de Patrimonio y en este caso natural.
Se destacan algunas acciones y procedimientos en la aplicación de normas y técnicas vinculantes, que convergen el año 2015, a cuarenta años del convenio, en el desarrollo de una exposición itinerante la cual busca informar, dar a conocer y crear sensibilidad sobre el valor de la biodiversidad, así como el peligro que representa el tráfico de vida silvestre.
Cites es un acuerdo que aplica regulaciones al comercio de especies de fauna y flora silvestres, aplicadas tanto a especímenes animales y vegetales vivos, por el ejemplo en el caso de la vicuña[2], especie nativa afectada por la caza furtiva y comercialización ilegal de su fibra, un problema que persiste hasta ahora[3]. De mismo modo, Cites regula derivados tales como: animales en taxidermia, pieles, huesos, plumas, cráneos, trofeos, muestras de tejidos y objetos.
Estas regulaciones se aplican a especies incluidas en los Apéndices del Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres[4]. Destacando la protección y conservación de especies nativas como la Araucaria (Araucaria araucana); Tortuga laúd (Dermochelys coriácea); Ñandú (Rhea pennata trapacensis); Pingüino de Humboldt (Spheniscus humboldtii); Cóndor (Vultur gryphus); Vicuña (Vicugna vicugna); Cachalote (Physeter catodon); entre otras totalizando 326 especies chilenas incluidas en Cites[5].
Para la aplicación de Cites, se designan autoridades tanto administrativas: SAG: Fauna y flora no forestal; CONAF: Flora forestal; SERNAPESCA: Fauna hidrobiológica. Como autoridades científicas: Museo Nacional de Historia Natural (MNHN): Fauna, y flora no forestal. Instituto Forestal( INFOR): Flora forestal. Laboratorio de Elasmobraquios (ELASMOLAB), Facultad de Ciencias, UACH: Fauna hidrobiológica.
El año 2015 se conmemoraron cuatro décadas de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), suscrita por Chile[6]. Ante lo cual se plantea la necesidad de dar a conocer la labor que el país ha realizado por implementar la Convención, destacando diferentes iniciativas públicas y privadas, que protegen a las especies amenazadas por el comercio internacional.
Junto con celebrar este aniversario, el Museo de Historia Natural de Valparaíso desarrolla una exhibición itinerante "Protege la biodiversidad, 40 años de Cites en Chile"[7] que busca sensibilizar, educar y llamar a la acción, para tomar conciencia sobre el valor de la biodiversidad nacional y mundial. Proyecto que fue desarrollado en el marco del Acuerdo de Cooperación Ambiental Chile - Estados Unidos, a través del esfuerzo conjunto de científicos, educadores, fotógrafos, artistas y expertos en flora y fauna silvestre de diferentes servicios e instituciones estatales y organizaciones no gubernamentales sin fines de lucro.
Para la organización de esta exhibición se plantea un guión museológico donde es posible visualizar tres tópicos:
• Sensibilización: la cual explica el ABC de CITES, a través de textos e imágenes de animales y plantas en su estado natural;
• Educación: la cual explica en qué consiste el tráfico de vida silvestre en Chile, a través de una selección de casos reales; y
• Acción: para explicar cómo niños, jóvenes y adultos pueden apoyar a las organizaciones que trabajan por implementar CITES en Chile.
Son 10 paneles expositivos con 20 caras que incluyen amplia información sobre CITES en Chile, incluyendo textos, imágenes, dibujos e infografía. Además se han sumado algunas vitrinas con objetos incautados por el servicio aduanero en la frontera chilena. Conjuntamente se desarrollan videos, un sitio web: Cites Chile[8], políticos informativos, publicaciones, charlas con especialistas, actividades educativas, talleres especializados, y otras actividades de difusión, como el recorrido itinerante en primera instancia por las ciudades de Valparaíso, Santiago y Talca.
Sin duda el alcance de público en esta instancia fue muy amplio alrededor, de un millón de personas, las cuales conocieron y se acercaron al mensajes de Cites en Chile. Por consiguiente las posibilidades futuras de un mayor alcance son concretas y sus beneficios educativos muy favorable.
Si pensamos entonces la pregunta inicial de este informe ¿Lo que podemos salvar? Debemos resaltar la premisa de sostener los esfuerzos en educar y transmitir a las personas el valor de conservar, proteger nuestro patrimonio natural. Es por ello que además de las regulaciones existe una instancia en la práctica, donde el producto o campaña informativa converge en las personas, es ahí donde la tutela que podemos desarrollar es fundamental para los procesos preventivos, en cuanto a qué decisiones representan de mejor manera la defensa o protección del patrimonio en cuestión.
Sin duda uno de los focos fundamentales de público es el escolar, son quienes en su mayoría acceden a instancias de carácter educativo no formal[9] en sus visitas a este tipo de exposiciones. También los emplazamientos son determinantes con el fin de optimizar el acceso. Por ejemplo para la exhibición de esta muestra se escogieron diversos lugares tanto emblemáticos, como el Congreso Nacional; Algunos especializados, como el Instituto Pesquero o centros educativos de educación superior; Otros de masiva concurrencia como el Parque Metropolitano o la Plaza de la Constitución; Y del mismo modo donde pudiesen asistir escolares como el Municipio de Valparaíso. También se hace entrega de un video introductorio[10] que hiciera referencia a los tres tópicos antes descritos, complementariamente se disponen otros videos animados[11] preparados especialmente por la Wildlife Conservation Society-Chile, gracias al financiamiento del Fondo de Protección Ambiental año 2012 del Ministerio del Medio Ambiente.
Otro aspecto influyente son las posibilidades de inversión, por ejemplo en el caso de la itinerancia "40 años de CITES en Chile" se ha optado por paneles de exhibición y vitrinas con objetos, lo que ha facilitado su desarrollo y adaptabilidad en diferentes tipos de espacios expositivos. Ahora bien cuando pensamos y evaluamos la eficacia de este diseño, podemos considerar por una parte las estadísticas de acceso, los comentarios entregados por los visitantes, y es ahí donde se evidencia la necesidad de un mediador (educador no formal) ante los contenidos y mensajes de la exposición con el trabajo y aprendizaje que podemos tomar de ésta. Es evidente que el trabajo debe profundizarse en otras etapas, es por ello la necesidad que el mensaje educativo trascienda más allá de la exposición, capacitando a docentes, entregando recursos didácticos y creando conciencia en las personas, insertando estos temas en el cotidiano, en nuestra formación cultural.
La labor pareciera estar recién comenzando, si bien cuando se ha designado algo como patrimonio no basta con hacer mención a ello, ni tampoco ceñirse a las directrices de un convenio, debe existir la convicción de un trabajo a largo plazo, con el fin de que nuestra tutela considere todos los aspectos, como es la mantención y defensa, el patrimonio es parte de nuestras vidas y nosotros somos parte de ese patrimonio. Con la exposición "40 años de Cites en Chile" se ha dado un paso necesario que refuerza, difunde y nos previene de lo que conforma el patrimonio natural a nivel local y mundial.
La asistencia o tutela ejercida sobre el Convenio Cites en Chile, se ha fortalecido durante estos cuarenta años, en las capacidades de gestión y protección del patrimonio natural, estableciendo una labor colaborativa, que ha dispuesto de una planificación por ejemplo en el uso público de parques nacionales, el estado de los glaciales y la conservación de nuestras especies silvestres.
Valparaíso, 22 de febrero 2016.
Juan Pablo Cruz Gallardo. Área de Educación y Mediación.
Museo de Historia Natural de Valparaíso.
Bibliografía
Hein, G.E. "El papel de los museos en la sociedad. Educación y acción social" Revista Curator. The museum journal, 48, s 2005: 357-363.
Munari, A. "Jean Piaget, 1869-1980" UNESCO: Oficina Internacional de Educación, vol. XXIV, nos 1-2, 1994: 315-332.
Vygotsky, L. S. (1931/1986): Historia del desarrollo de las funciones psíquicas superiores. Tomo III, Obras escogidas. Madrid, Visor.
"Convención sobre el Comercio internacional de especies amenazadas de Fauna y flora silvestres Cites" Ministerio de Agricultura. Servicio Agrícola y Ganadero. Departamento de Protección de Recursos Naturales Renovables. Gobierno de Chile, 2003.
UNESCO (2006). Convención sobre la protección del patrimonio mundial cultural y natural. París: Centro del
Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Sitio Web del ICOM: www.icom.museum
Sitio Web CITES Chile: www.citeschile.cl
Sitio Web Servicio Agricola Ganadero, Chile: www.sag.cl
[1]¿Qué es Cites? CITES es la sigla en inglés que sirve para identificar la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres. CITES constituye uno de los acuerdos multinacionales más antiguos e importantes en materia de protección de fauna y flora silvestre. Surge como respuesta internacional frente al riesgo y amenaza que los elevados niveles de explotación y comercio internacional estaban teniendo sobre la vida silvestre.
[2] La vicuña (Vicugna vicugna Molina) es el más pequeño de los camélidos sudamericanos y la forma ancestral de la alpaca doméstica.
[3] "La suma de esfuerzos locales, nacionales e internacionales llevó a la recuperación de esta especie y logró que en la actualidad la población conjunta de Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú superara los 500.000 individuos. Tres décadas y media después de la firma del Convenio de la Vicuña, la caza furtiva sigue siendo la principal amenaza para la especie" La caza furtiva de la vicuña y comercialización ilegal de fibra: un problema que persiste, Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
[4] "Convención sobre el Comercio internacional de especies amenazadas de Fauna y flora silvestres Cites" Ministerio de Agricultura. Servicio Agrícola y Ganadero. Departamento de Protección de Recursos Naturales Renovables. Gobierno de Chile, 2003.
[5] Ídem cita 4. Ver listado completo en anexo V (p.53)
[6] La convención CITES fue suscrita por Chile el 16 de septiembre de 1974, siendo el octavo país en hacerlo. Posteriormente, en 1975, el Gobierno la aprobó y transformó en Ley de la República mediante el Decreto Ley N° 873 (Diario Oficial del 28-01-75) y el Decreto Supremo N°141 del Ministerio de Relaciones Exteriores (Diario Oficial del 25-03-75). En nuestro país, la Convención entró oficialmente en vigor el 1 de julio de 1975.
[7] Organiza: Museo de Historia Natural de Valparaíso-DIBAM. Colaboran: Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Corporación Nacional Forestal (CONAF), Ministerio del Medio Ambiente, Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (SERNAPESCA), Dirección de Asuntos Marítimos y Medio Ambientales (DIMA) del Ministerio de Relaciones Exteriores, Instituto Nacional Forestal (INFOR), Museo Nacional de Historia Natural (MNHN), Laboratorio de Elasmobranquios (ELASMOLAB) del Instituto de Ciencias Marinas y Limnológicas de la Universidad Austral, Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medio Ambiente y Patrimonio Cultural de Policía de Investigaciones de Chile (BIDEMA-PDI), Departamento OS5 de Carabineros de Chile (OS5), Servicio Nacional de Aduanas de Chile, Wildlife Conservation Society-Chile (WCS), Bioparque Quillón, Comité Pro Defensa de la Flora y Fauna (CODEFF), Centro de Primates de Peñaflor, Ecopolis Disciplinas Integrales, WWF, IFAW, Zoológico Metropolitano, PEW, Ilustre Municipalidad de Valparaíso y Fundación Ecoscience, editorial Pehuén. Patrocinan: Gobierno de Chile (Comité Nacional CITES), Gobierno de Estados Unidos (Programa Internacional de Asistencia Técnica del Departamento de Interior y Departamento de Estado) y Secretaria CITES de Ginebra.
[8] http://www.citeschile.cl
[9] En el ámbito de la investigación museológica se plantea un cambio de paradigma en la percepción de los museos desde la concepción modernista al posmodernismo donde el protagonismo de los diferentes públicos que acceden lo viven desde la experiencia participativa (Hooper-Greenhill, 2000). La extensión de metodológica se ha vinculado entonces con la educación no formal y las bases del constructivismo (Vygosky, 1978), así como las teorías del aprendizaje (Piaget, 1952).
[10] Ver video "Protegiendo la biodiversidad, 40 años de Cites en Chile" [11] Ver cortos animados "El Huemul" y "El guanaco" dos especies nativas de nuestra región amenazadas de extinción.