En un día lleno simbolismo y emoción, la comunidad Diaguita “Guacalagasta” conmemoró a sus ancestros en el marco de la “I Jornada de Exposición: Conexiones con nuestros ancestros”, que se desarrolló en el marco del descubrimiento de restos humanos en plaza O’Higgins, y que están siendo exhibidos en la exposición “Bajo la Superficie: el surgimiento de la historia de Valparaíso”.
María Campillay Gomolán, descendiente indígena y presidenta de la comunidad Diaguita “Guacalagasta” (Pueblo de Palo Santo), señaló que “nos asombra las reacciones de la gente que ve la exposición; muchos se sorprenden, pero también hay otros que aprecian a las personas que vivieron allí”
La exhibición no sólo da cuenta de los hallazgos de los arqueólogos, que tiene los vestigios encontrados en el lugar, y que permiten establecer que en el sector habitaron diversos grupos humanos desde el 700 a.C, sino que además se volvió una oportunidad para que el museo tuviera un acercamiento con la comunidad Diaguita “Guacalagasta”. “Nosotros queremos hacernos presente, para que la gente se enriquezca y conozca la importancia de los elementos que se encontraron en la plaza; que haya vasijas tan bien conservadas nos cuenta que los habitantes de esa época trataban la materia prima de una manera particular, tenían una manera distinta de ver y hacer las cosas”, se refirió María Campillay Gomolán.
Tradiciones vivas
Con rezos y canticos, la comunidad Diaguita Guacalagasta celebró la “I Jornada de Exposición: Conexiones con nuestros ancestros”. Todo comenzó con una rogativa que reunió a los asistentes a las afueras del auditorio del MHNV, donde a través de una súplica, los diaguitas de Valparaíso pidieron a sus ancestros paz y entendimiento, para luego dar inicio a la primera ponencia.
Luego de esto, se presentaron tres informes (correspondiente a los sitios del Olivar y el Estero de las Delicias), a la comunidad indígena que daban a conocer los avances de las investigaciones que han realizado diversos arqueólogos, y en el cual se han descubierto osamentas de personas y animales.
Durante el acto, se presentó el coro “Diaguitas” y el cuadro infantil de la comunidad, quienes deleitaron al auditorio con el cuento “La Caverna” representado por lo niños y niñas Guacalagastas.
Otros hallazgos
El sitio arqueológico El Olivar ubicado a cuatro kilómetros al norte de La Serena, descubierto en 1939, permite configurar de mejor forma la prehistoria del norte de Chile. Se trata de uno de los mayores hallazgos arqueológicos de los últimos tiempos en Chile y Sudamérica, que aporta no sólo un legado de cultura material sobresaliente, sino también un potencial de información inédito acerca de nuestro pasado precolombino.
Este hallazgo nos muestra varios siglos de desarrollo de la cultura Diaguita y de la llegada de los representantes de Imperio Inca al Valle del Elqui, igualmente nos revelan la forma de pensar, de dimensionar el universo, la cosmovisión religiosa y las formas de vida que tenían esos pueblos.
Con los recientes descubrimientos, la comunidad Guacalagasta tiene diversas iniciativas que tienen como objetivo traspasar el conocimiento indígena a niños y adolescentes, además de dar a conocer los recientes hallazgos tanto en la plaza O’Higgins como en el Olivar. María Campillay Gomolán destacó la importancia en el reconocimiento de su comunidad “queremos que en la plaza O’Higgins, donde se encontraron parte de nuestros ancestros, haya un monumento que tenga una placa que reconozca que hubo asentamiento indígena”.
La exposición “Bajo la Superficie: el surgimiento de la historia de Valparaíso” estará disponible de manera gratuita hasta fines de marzo en el hall del MHNV.