El Museo de Historia Natural de Valparaíso fue testigo de una actividad inédita en sus 144 años de historia, pues el sábado 14 de enero se realizó un gran desfile de moda, que convocó a connotados diseñadores de la región y del país. Asimismo, hubo una feria para emprendedores, conversatorios y una función de títeres. Todo en el marco de la actividad “El Museo se viste sostenible”

Pero, cómo nació esta idea,  que es todo un hito para esta institución. Para eso, hay que remontarse al 2021 cuando se crea el área de gestión ambiental, siendo la única que existe en el Servicio Nacional del Patrimonio. A través de ella y tras sumarse al programa Estado verde, se realizó un diagnóstico, que permitió crear una política de autogestión ambiental y un plan de gestión ambiental con medidas y metas permanentes.

En ese contexto nace "Museo se viste sostenible", evento que busca difundir a creadores y emprendimientos nacionales con énfasis en el desarrollo sostenible de sus productos y aporte a la economía circular, en la que la colaboración ha sido el eje central.

Una de las gestoras de este proceso es Cinthia Mora, quien lidera el área de gestión ambiental del museo porteño.

"No hay dinero de por medio para pagar los honorarios de los y las diseñadoras, tampoco a las maquilladoras, modelos, panelistas del conversatorio, fotógrafos, DJs. Toda la gente quiso participar entendiendo que es un tema muy importante de acercar, desde la problemática hasta las soluciones, y como museo estamos muy agradecidos de que hayan querido sumarse y desde sus experiencias y conocimientos aportar, invitando a reflexionar y convertirnos en consumidores informados  más responsables y conscientes", expresó.

Desde esa perspectiva, la profesional añadió, que la selección de etiquetas se hizo pensando en diseñadores (as) que se preocuparan de los impactos negativos que tiene la industria textil, en relación a las materias primas a utilizar para confeccionar una prenda.

 "La mayoría usan como materias primas telas existentes como jeans, faldas, entre otros y las transforman en nuevas prendas. En el caso de la marca de zapatos, usan materias primas más ecológicas como nogal, que es un cactus", agregó.

Esos aspectos se combinan con propuestas que apelan a la calidad y heredabilidad junto a precios accesibles, así también al ámbito social, es decir, etiquetas que laboran bajo el prisma del trabajo justo. "Es el  caso de las chicas de Pagana, que trabajan junto a mujeres en situación de vulnerabilidad en Maipú", comenta.

Para Darlyn Riquelme, Co Fundadora de Retrorecicla y una de las organizadora , esta actividad fue todo un éxito tras largo 6 meses de trabajo..

“Esto fue todo un desafío, pues todos los colaboradores estaban muy entusiasmados con esta iniciativa. Además, para nosotros como organización, era un gran desafío poder tratar esta problemática, pues como Retrocicla era muy importante visibilizar, mostrar esta realidad que afecta a todos.