Petroglifos de diferentes dimensiones en las partes altas del Valle de Chalinga encontraron los arqueólogos del Museo de Historia Natural de Valparaíso, quienes investigaban los grupos prehispánicos que habitaron la zona desde el 200 d.C.
Su elevado emplazamiento tenía como objetivo que los dibujos fuesen vistos desde lejos por la comunidad. Los tamaños de los diseños varían desde el porte de una mano hasta aquellos que son casi del tamaño de una persona.
La técnica de elaboración de los petroglifos consistía en percutir con una piedra de gran dureza un dibujo sobre una roca.
Los diseños realizados por los antiguos habitantes se pueden clasificar en dos grandes grupos:
- Motivos abstractos: figuras geométricas, de líneas con cuadrados, y trazos en zigzag con círculos. Hasta hoy, los arqueólogos no han pidido descifrar el significado de estas figuras.
- Representaciones de figuras humanas, animales y aves, cerros y el sol y figuras naturalistas. En este caso, su interpretación ha sido fácilmente descifrable.
El arte rupestre es una de las manifestaciones artísticas más antiguas desarrolladas por los grupos humanos. Pese a que en algunas partes del Amazonas aún persiste su práctica, en la mayoría del continente desapareció poco después del contacto con los europeos.
En la actualidad, existen en Chile numerosos petroglifos y geoglifos dispersos en los valles del Norte Chico y de la Zona Central.
